Mision en Paris...

Los hombres que le había visto primero estaban sorprendidos al ver el enorme agujero que había ahora en el techo del lugar. El chico que acompañaba a la exorcista había salido agilmente por allí para seguir a lo que sea que había provocado eso.

- Pe-pero... ¿Que fue eso?- pregunto el que antes había mostrado esa fuerza al golpear la pared. Parecía sorprendido al ver aquel techo sumamente resistente quebrado como si hubiese sido un espejo, el mismo aspecto tenía su otro compañero.

- Escapo.. era un akuma - penso Alice, llevando su mano inconcientemente hacia su cuello. Claro su inocencia estaba activada, su voz les debio haberle molestado y de seguro escapo para salvarse.- ¡¡aah!! ¡¡Leandro!!- grito ella al darse cuenta que se había quedado atrás. Se dio la vuelta para salir por una entrada un poco mas común, ya que no saldría por el techo.

- ¡oye tu! ¡Espera...! Dinos ¿Que era eso?- Alice le miro.

- Eso deberian saverlo ustedes, ya que estaban aquí adentro conversando con ellos o él ¿no? - indago ella.

- Pero es imposible, esa persona solo nos traían la mercancía...- Alice abrió los ojos sorprendida al escucharlo.- Es imposible que halla hecho esto.- le dijo el hombre mirando el techo, obviamente el ignoraba el hecho de la existencia de los akumas.

Alice suspiro, odiaba tener que tratar con esto, pero no podía andar diciendo la verdad a cualquiera que encontrara.- Para la proxima deben ser mas cuidadosos con quienes esten haciendo un negocio.- les dijo ella a modo de regaño, como si fuera una madre o algo por estilo. Antes de que le pudieran decir algo más para detenerla, salió corriendo por la misma entrada que había usado antes y busco rápidamente a Leandro en la dirección por la cual había desaparecido.

La noche solo era iluminada por la blanca luna que estaba en el cielo, por lo que ver el camino o alguna silueta corriendo por allí era mucho mas fácil. Miro hacia ambas direcciones antes de saltar agilmente hacia un techo cercano, desde allí pudo distinguir la figura de "algo" que surcaba el cielo nocturno. Sus largas manos que iban colgando de su cuerpo parecían llevar un paquete muy importante.

Dejo las conclusiones para después, era hora de seguirlo, ya de seguro Leandro llevaba un buen camino recorrido, no podía quedarse atrás.

El grito de Leandro hizo que apurara su paso.- tch... maldita cosa...- y por fin se quitaba la capa que tenía puesta de hace mucho rato. La dejo tirada por ahí, sin importar si la perdía o no. En verdad le incomodaba al correr, así qe cuando por fin se la quito de encima pudo correr mucho mas rápido y agilmente hacia donde estaba Leandro.

Distinguiendo a los lejos lo que parecía ser una casa, no parecía una casa modesta, pero tampoco era una mansión de algun millonario y se encontraba a metros de la entrada de Paris. En resumen la casa se veía bastante normal, quitándole que estaba un poco descuidada ¿Que hacía el akuma allí? y ¿Qué es lo que había en el lugar? fueron las preguntas que se curzaron por su mente.

Al llegar cerca de la mansión pudo oir claramente una risa un tanto frivola, además de que la puerta y las ventanas de la parte delantera se abrieron simultaneamente por algun tipo de viento que venía de su interior.

- ¡¡Leandro hazte a un lado!!- le grito Alice alarmada por que diez segundos después de que se abrieran las ventanas comenzaron a salir disparos de ellas, había mas akumas de lo que hubiesen imaginado.

Alice esquivo rápidamente aquellas balas,las cuales reconoció como de akuma, esperando que Leandro también lohubiese hecho.

Alice dio unos pasos hacia atrás cuando los akumas comenzaron a aparecer uno tras otro. Salían de cualquier parte, era molesto. Hasta de la misma tierra salieron unos cuantos niveles uno, que con sus cañones apuntaron hacia ellos amenazadoramente.

El grito de su compañero le advirtió enseguida sobre aquello, es verdad todavía faltaba el de adentro.- Ese no se no escapa...- murmuro ella para sí misma, como si se tratara de un desafio que debía ganar a toda costa.

Segundos después del aviso de Leandro, tomo aire suficiente para poder cantar una linda melodia. Los akumas mas proximos a ella estallaron, los mas lejanos estaban aturdidos y con la defensa baja para ser eliminados con algun ataque final.

Mientras pasaba eso, Alice se movía desde donde estaba, por un costado avanzaba hacia la casa. Solo dejaba de cantar por algunos intervalos de segundos y luego volvía hacerlo. Aun así los akumas que estaban a lo lejos y que no sentían el canto de Alice podían atacarles desde esa distancia por lo que debían tener cuidado.

Como ya estaba cerca de la casa, lo único que tenía que hacer ahora era gritar.
- ¡Oye akuma... acaso eres cobarde! - le grito de ella para insultarlo. Enseguida se sintió como un alarido molesto dentro dela casa y unas palabras inteligibles que por su tono parecía que fuera de alguien endemoniado. Al parecer había causado la ira de aquel Akuma

- "...maldición"- paso por su cabeza aquella palabra, mientras la casa se destruía completamente cuando el akuma salió de ella. Obvio que no salió por la puerta, si no la casa no se hubiese hecho añicos.

Las partes de la casa salieron volando hacia a los lados, callendo estrepitosamente al suelo, las ventanas se rompieron dejando el cristal en el suelo, en resumen aquel campo estaba lleno de escombros. Como si hubiese habido una bomba en el centro de la casa que la destruyo completamente.

Alice se cubrió con sus brazos al ver, como aquellos pedazos de la casa podían lastimarla, camino unos pasos atrás para esquivar algunos troxos de ella. Cuando termino bajo sus brazos para ver al responsable de aquello. El akuma era terrorifico, una blanca sonrisa maniatica se podía notar, sus ojos eran pequeños en comparación con lo que era su cabeza. Las extremidades superiores parecían mas largas que su propio cuerpo, estas colgaban hacia adelante, ademásque eran delgadas.

- Vaya me descubrieron.- exclamo, tosiendo un poco mirando a ambos exorcistas con el ceño fruncido o eso parecia porque no poseía cejas para poder identificarlo fiablemente. El arma de Leandro se encontraba en su mano y se podía ver una herida superficial en lo que era su espalda, o mas bien su lomo, ya que este akuma estaba encorvado.

- Que exorcistas tan molestos...- siguió diciendo este, se notaba que la inocencia de Leandro le había dañado algo y eso le molestaba.

- ¡Tu eres el responsable de lo que ocurre con los chocolates y lo que le hacen a la gente!- no era una pregunta, era una total afirmación por parte de la exorcista. Le apunto con el dedo acusándolo y gritando, le había dicho eso, cosa que al akuma no le gusto.

Tenía un tic en el ojo al escuchar la voz de la chica, su voz le había dolido, no le gusto, parecía como si hubiese estado apunto de morir si no se hubiese callado, ya que Alice solo había dicho eso. La sonrisa del akuma se hizo mas notoria, Alice bajo el brazo con el que le apuntaba, al ver esa extraña reacción en él.

El arma de Leandro fue lanzada a metros de ellos por el akuma. Alice se apresuro a buscarla enseguida, pero no penso que el akuma le obstaculizaría el paso.

- Esta bien yo te cubro.- Le dijo la exorcista sumamente decidida. Mientras el akuma reía ante aquellas palabras tan valerosas de la chica. La pequeña figura de Alice no le parecía ser la adecuada para cubrir a su compañero.

Pero nunca había que juzgar por las apariencias, en un segundo el akuma se alejo del lugar espantado, Alice había comenzado a entonar una bella melodía, al menos para cualquier humano que la oyera así era. Solo los akumas encontraban horrible aquella canción y aquel timbre de voz le estaba matando. Poco a poco fueron destruyéndose primero los de nivel uno, mientras su compañero se perdía por el bosque en búsqueda de sus armas.

- Maldita exorcista.- El otro de nivel dos había volado lejos de allí, de solo oír aquella amenaza que llamaba canción. Se fijo que ambos exorcistas estaban separados y se le ocurrió una idea para atrapar a la chica y su molesto poder.

Enseguida unos niveles uno que se encontraban lejos apuntaron a Alice, mas bien apuntaron al piso que estaba a centímetros de ella. Eso hizo que se levantara polvo y que Alice dejará de cantar, el polvo tapaba su garganta y no podía respirar bien para proseguir con su ataque.

Al ver que la chica no seguiría con aquello se apresuraron donde estaba Leandro que intentaba llegar a donde estaba su compañera, comenzaron a dispararle para que no pudiera ayudarla. Quedaban pocos niveles unos, más el nivel dos que parecía reacio a perder.

- Te descuidaste niña...- comento el nivel dos, el cual intento atrapar a Alice, mientras ella trataba de salir de allí para buscar un lugar con menos polvo y tierra en el aire. Pero era imposible los akumas seguían disparando hacia el piso, hasta casi un disparado le da a ella de no ser por sus reflejos.

Viendo como ahora la persona en apuros era Alice, Leandro corrio energicamente hacia su compañera, para socorrerla, lamentablemente para el akuma de nivel 2, las maquinas infernales de mas bajo nivel estaban en una hilera, haciendo mas facil la labor del moreno, lanzando una de sus cuchillas hacia ellos en forma de boomerang,mientras el corria zigzageandopor los arboles para no ser un blanco facil, asi depejo el camino para Alice, mientras que con la otra arma del peliblanco, la lanzo en sentido de su compañera, impulsandose con un tronco, saltando previamente, y por consiguiente, saltando en paralelo al piso, para poder disipar mas rapidamente el polvo con el girar de este en su propio eje, agregandole mas efecto y velocidad a su arma con este movimiento, el compañero de la chica le dijo antes, gritandole.

- ¡No te muevas hacia la derecha Alice! (este es el lugar donde lanzo el arma Leandro)

. Finalmente Alice pudo volver a respirar normalmente, mientras el chico exorcista, se reincorporaba tomando ambas armas, que regresaban a el.

Corriendo nuevamente en direccion de su compañera para poder asistirla, y por ultimo derrotar a ese monstruo.

Spoiler:

Por podía respirar mucho mejor, gracias a Leandro, quien le había advertido antes, cuando lanzo su arma. Y menos mal que hizo caso a su advertencia, de no haber sido así aquella arma le hubiera dado a ella, dejándole mal herida.

Ahora su compañera llegaba hacia donde estaba ella, se preparo para una posible batalla final. El akuma nivel dos les miraba divertido ante como aquel exorcista salvaba a su compañera, iba a ir por él. Pero algo le detuvo, un golpe en su cabeza, volteo para ver quien había sido aquel.

Alice le miraba con el ceño fruncido, parecía molesta por aquel truco sucio que había hecho para evitar que peleara. En su mano había una pequeña piedra, al parecer eso era lo que le había lanzado al akuma, quien parecía molesto y furioso ante ello.

- ¡Akuma tonto!- le grito ella burlándose infantilmente de él, y lanzo otra indefensa piedra, la cual fue agarrada por el akuma rápidamente y lanzada hacia otro lado. Parecía ofendido de cierta forma ¿Creían que le iban a ganar arrojándole piedras? Sin embargo Alice esperaba eso del akuma, que se enojara ante aquello.

- ¿Tonto? Tú serás la tonta, exorcista.- exclamo el akuma. Eso hizo que la mueca de Alice cambiara leve y fugazmente a una enfurecida. Pero solo fue por unos pocos segundos.

- “Bastardo… no sabes con quien te metes”.- pensó ella con un tono de burla y crueldad. Fue en esos pocos segundos, que el akuma comenzó a correr, dirigiéndose a sus posiciones. Mientras lo que eran sus brazos, parecían ir peligrosamente hacia sus cabezas, para atravesarlas completamente gracias a aquella velocidad.

- Leandro… separémonos cuando sea el momento y lánzale una de tus cuchillas.- susurro rápidamente a su compañero, esperaba que entendiera que cuando tuviera la oportunidad lanzara la otra. El akuma se aproximaba peligrosamente hacia ellos, así que Alice esquivo al akuma, esperando que su compañero hiciera lo mismo. Porque ella, apenas tuvo la oportunidad, uso su propia su inocencia; una refinada y aguda voz salía de su boca, provocando en el akuma de nivel dos espasmos de dolor.

[OFF: Debido a la petición de user Lilium, el tema queda cerrado por la ausencia de el user Leandro. A pasado más de un mes desde el último posteo del personaje de éste último, así que el tema queda cerrado.

Lilium: Puede pasarse a coger misión para no estar detenida.

Leandro: Estará directamente en la Orden a la espera de que venga, y/o pida misión tambien o reseguimiento del tema.

A cualquier cosa y recogida de puntos, debe postearse en su sitio correspondiente o comentarlo con un Admin para evaluar la situación.

Hasta entonces...

TEMA CERRADO]