A Las Vegas - Cross Roads

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Mar Dic 16, 2008 4:41 pm

No sabía en que orden empezar para enumerar la serie de acontecimientos que a simple vista insignificantes, estaban llenos de significado, alguno muy extraño… de alguna manera… sentía que presenciaba algo de vital importancia.

¿Qué era eso? No había forma de describirlo, la palabra ‘eso’ le parecía la más adecuada, no sabía si referirse a aquella presencia como algo o alguien… lo hecho era que estaba vivo… estaba vivo dentro de aquel muchacho que hacía momentos se estaba muriendo en sus manos.

Cuando esos ojos vacíos reflejaron su propio mirar sintió como el corazón se le aceleraba de repente, y la sangre empezaba a circular de manera frenética, tal como sucedió con el chico debido a la presión en la garganta. No conseguía salir de ese trance, los músculos, su mente, y hasta quizás su alma si poseía una… eran incapaces de hacer nada. Estaba helado, petrificado ante cada uno de los suceso que venían sucediendo ¿qué reflejaría su rostro? A través de esos ojos vacíos solo existía el horror, traslucido y palpable como tal, esbozado en esa macabra sonrisa reflejada en los cristales donde mostraban a un tercero… el tercer invitado de la noche, un fantasma… alguien con quien no contaba… ¿Quién era? ¿Quién es esa cosa y que hacía en medio de ellos dos?

- ¿Quién… quien eres tú? – musitó entrecortadamente sin salir completamente de aquel velo oscuro que le impedía pensar con claridad, más aun así mostraba claramente la nota de desafío en su voz.

Y para su sorpresa, esperando que sus manos se moviesen o hiciesen algo, lo que fuese solo para mostrar que aun tenía control de sus acciones. Estas empezaron a apartarse con fuerza tal del cuerpo del exorcista, como si unas manos se tensaran en las suyas y las desprendieran del chico como si lo hubiese hecho alguien más… no podía ser ese niño que le miraba de forma ausente, y aun así tan aterradoramente…

-No. Toques. A mí Allen.

Los ojos de Tyki se abrieron como platos al escuchar esa frase ¿no se refería a él como propio sino en tercera persona? Era como si… no fuese él en ese momento, sino otro. Eso no tenía sentido. Retrocedió por mera cautela anteponiendo su antebrazo derecho ante la ventisca que le azotaba. Las palabras de ‘eso’ aun resonaban en sus oídos como ecos imposibles de desvanecer, esa voz autoritaria y carente de emoción con cierta nota de amenaza aun retumbaba en sus sienes, como una maldición.

-No.

-No. Lo toques.

… A mí Allen

- ¡Basta! – chilló el Noé lanzando una mirada venenosa al niño, pero no era a él a quien se la dedicaba, era a la cosa que estaba con él. Era a esa cosa que lo protegía y se interponía entre él y su venganza. Tyki destilaba veneno por la mirada como una víbora embravecida, su rostro estaba arrugado por la rabia que se sentía irradiar de sus costados. Y casi como una coincidencia o accidente más bien, sus ojos se desviaron a los cristales esparcidos en torno a ellos, en el reflejo de Allen había alguien tras él, un espectro que sonreía de oreja a oreja y sin embargo lucía tan terrorífico, su ceño fruncido mostraba cierto enojo ¿hacía que o quien?. Como un rayo la respuesta llegó a su cabeza: “hacía mí, esa cosa está enojada conmigo” “porque yo quería acabar con…”

¿Había dicho “su Allen”?

La sorpresa sustituyó inmediatamente a la rabia, y formo parte de un repentino horror, un escalofrío. Algo que se hallaba más allá del alcance racional y humano, y del suyo mismo. Lo que muy tenuemente podía notar mientras hallaba la calma en el silencio era que, esa sombra… la sentía tan familiar, como si una parte de su ser la reconociese, la conociera… El ceño de Tyki volvió a fruncirse confundido y airado ¿Acaso estaba jugando con él ese exorcista?

- ¿Qué rayos fue lo que hiciste, chaval? – sus labios describian una finísima línea recta que enseguida se curvó en una sonrisa de aspecto demencial, como si no estuviese en sus cabales y fuese presa de un ataque de locura o alguna clase de histeria - O mejor… ¿Cómo lo hiciste? ¿No me presentarás a la cosa que te ayudo? – Agregó enfatizando la palabra ‘cosa’ en la oración – vamos… cuéntamelo… - susurró con aire jovial, para luego convertir su rostro en una máscara amenazadora, sin rastro de la locura y abriendo paso a la rabia característica que reflejó hace rato – explícate antes de que cambie de parecer y te masacre junto con eso… - sentenció, fuera de si. En ese momento no era él mismo.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Mar Dic 16, 2008 11:30 pm

Las palabras de Tyki eran lejanas y carentes de sentido para Allen. Aún las primeras preguntas que se hizo a sí mismo en cuanto recobró el conocimiento rondaban en su mente, repetidas una y otra vez en forma de espiral.

¿Qué había pasado?, ¿En qué lugar estaba? ¿Qué había pasado?, ¿En qué lugar estaba? ¿Qué había pasado?, ¿En qué lugar estaba? ¿Qué había pasado?, ¿En qué lugar estaba? ¿Qué había pasado?, ¿En qué lugar estaba?...

Entonces su atención pudo captar por fin la última frase de su enemigo, que conservaba el mismo tono que había empleado con él en la batalla, que la verdad lo iluminó como un repentino fogonazo y lo impulsó casi por inercia a abrir desmesuradamente sus ojos y levantarse de golpe del suelo, conciente, hasta sentarse sobre él. Ya conciente de verdad.

Parpadeó varias veces y bastó con unos pocos segundos para volver a recordar la situación en la que se encontraba, que no denotaba ningún rastro de paz ni mucho menos armonía.

-¿Mi Inocencia? –sólo había querido mencionarla, pero el remolino que significaban sus pensamientos era tan turbio que las palabras le salieron como una pregunta. Rodó los ojos más lento de lo que quería hacia su arma y en cuanto la miró, esta acudió casi como por arte de magia al encuentro con su dueño, quién la sostuvo firmemente con su diestra.

Entonces se puso de pie y colocó en posición defensiva, como si estuviese retomando el capítulo que había hecho pausa momentos antes, por algo que para él representaba un recuerdo borroso, casi indescifrable. Él, al igual que su rival, no tenía en claro lo que había acontecido.

-Siento mucho no poder explicarte lo que sucedió, Tyki, pero ni yo mismo sé exactamente qué fue lo que pasó –declaró el muchacho nuevamente con el semblante serio, demudando su rostro a una máscara impertérrita al igual que su voz. Sus pensamientos sólo reproducían el hoyo oscuro y la repentina luz que lo sacó del abismo y de ahí, se cortaban como si fueran una cinta rayada en determinada escena.- Y aún así me pregunto, ¿Pretendes continuar con esta batalla sin sentido? –espetó, y en su expresión estaba impresa el verdadero deseo del albino.

Ojala sólo se tratara de un simple juego de póker…

…en donde nadie tiene que morir…

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Miér Dic 17, 2008 3:39 pm

Una oleada de ira pura recorrió cada extremidad de su ser, como un huracán arrasando con todo lo que tenía interior: su razón, su ser mismo… Era incapaz de controlar todas esas emociones que hacían explosión dentro de sí. Apenas y notaba que el chico “volvía en sí” desorientado al principio… ignorante de lo que había sucedido hace instantes… como si todo aquello no lo hubiese protagonizado concientemente. Muy levemente su vista bajó hacía los cristales en el suelo, allí estaba la prueba de que todo lo sucedido no solo había sido real, sino que lo había hecho ‘eso’ que se reflejaba como una sombra tras la silueta del joven albino… Los parpados inferiores le temblaron por un segundo como un tic nervioso.

El arma regresaba a manos del dueño y este tomaba su parte en el asunto. Sin embargo la respuesta no satisfació a Tyki ni un poco, ¿acaso estaba huyendo del tema? ¿Le estaba tomando el pelo? ¡Como rayos no iba a ser conciente de las acciones de ese espectro! ¿Quién era? ¿Qué era? Necesitaba saberlo ahora mismo, o de lo contrario acabaría con ambos sin vacilar… Estaba fuera de si, ya fuese por la rabia o por…

… el miedo.

¿Quién era? ¿Qué era?

¿Quién eres? ¿Qué eres?

Era como preguntárselo al Conde del Milenio. No había respuesta existente.

- No te quieras pasar de listo chaval – le espetó amenazadoramente, presa de todas aquellos sentimientos que se encontraban en su interior, reaccionaba como un animal arrinconado al cual no le queda otra opción que mostrar sus fauces y lanzarse al ataque de su agresor. Una mueca de rabia y verdadero enojo se marcó en las facciones del Noé que hace tan poco tiempo se había mostrado imperturbable y despreocupado y ahora… ahora estaba tan trastornado que le costaba mantener el poco control que tenía sobre sus acciones. Si aun lo tenía.

- Si no vas a responderme… entonces muere junto con esa cosa que está al otro lado del espejo tras de ti – rugió tomando un impulso aun mayor que los anteriores para lanzarse directamente hacía el chico sin vacilar, mientras en su diestra aparecía una especie de tenaza purpúrea de energía oscura, en cuyo filo tenía la intención más sincera de encajar en el pecho del exorcista… y de ese fantasma que lo protegía. Los mandaría a los dos al infierno de un solo golpe, y sería ese hervidero venenoso cociéndose en su interior el objeto de destrucción.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Miér Dic 17, 2008 5:37 pm

Conforme la batalla entre Tyki Mikk y Allen Walker se llevaba a cabo. Una tranquila figura se limitaba a hacer lo suyo en el interior de aquella iglesia por la cual avanzaba evadiendo los escombros ocasionados por el daño hecho a aquella sagrada edificación. Una humareda quedaba como rastro por donde pasaba aquel sujeto cuyo serio mirar escrutaba con cuidado cada pasillo, cada habitación de aquella gigantesca construcción. No había duda alguna en su mente, en algún lugar debía encontrarse aquella pieza de inocencia que había ocultado días atrás. Su diestra es llevada hacia la parte posterior de su cabeza para rascar sus rojizos cabellos mientras hace una mueca de decepción y desesperación a la vez que exclama hablando consigo mismo:

- Demonios! No debí de dejar el corazón después de beber tanto… ya no recuerdo donde lo dejé!!!!!!-

Sus gritos son fácilmente opacados por las constantes explosiones de akuma que caían cuales moscas ante el poder de su albino aprendiz. Cross no parece reparar en ello mientras llega a la sala donde solía habitar el padre entrando de manera lenta. La puerta emitió un chillido que le pareció reconocer mientras desviaba sus orbes hacia el lecho completamente desarreglado. Algo en el mismo llamó su atención por lo que pasó a aproximarse empuñando lo que se mostraba como una hermosa prenda íntima de tonalidades azuladas mezcladas con negro. Aquella prenda poseía elegantes pero sensuales encajes lo cual hizo que la mente de Marian recordara al instante lo sucedido aquella noche.

- Claro… ahora recuerdo. –

Se dijo a si mismo soltando la prenda sobre el lecho antes de avanzar hacia uno de aquellos muros donde una piedra se veía algo asomada por encima del resto. La misma fue empujada para accionar un mecanismo interno que puso en marcha una puerta corrediza oculta que había sido usada por el General en aquella ocasión. Una triunfal sonrisa se dibuja en el rostro del fumador que deja caer su cigarrillo al suelo de la emoción mientras abre el mismo extrayendo un diminuto cofre del famoso baúl. El mismo es tomado por Cross quien sale corriendo del sitio a toda prisa…

Mientras tanto la batalla aún rugía entre Tyki y Allen. Una feroz ofensiva era iniciada por parte del moreno más en su trayecto una ráfaga de gran poder es atravesada siendo la primera de las balas disparada con la única atención de llamar la atención. Dicha bala continúa su camino incrustándose en uno de los muros de la iglesia que pasa a recibir de lleno el impacto del temible y devastador poder del General Cross. Cuyo rostro esboza una arrogante sonrisa pensando que había llegado justo a tiempo.

Es así como Cross llega de nuevo ante su alumno quien ahora se encontraba peleando contra un miembro de la familia Noé. Ver a aquel sujeto le trajo recuerdos de lo sucedido en el arca más eso pareció no preocuparle al General cuya diestra sostiene empuñada su poderosa arma anti-akuma que pasa a apuntar hacia la cabeza de Tyki sin borrar su arrogante sonrisa del rostro. En la zurda aún llevaba el baúl que emitía un gran brillo.

- Así que nos volvemos a ver. Desafortunadamente tengo prisa y ocupo a mi tonto aprendiz como maletero, pero no te sientas mal!! Te daré 10 segundos de ventaja para salir corriendo lo más rápido que puedas, aprovéchalos … 1...2... 3 –

Conforme el conteo avanza el pulgar derecho de Cross es llevado al seguro de su pistola que es removido con un apenas audible “click”. Ciertamente Tyki parecía un terrible depredador al acecho, dejando a Allen en el patético papel de presa. Más con la entrada del General, el papel del domador de fieras estaba siendo ocupado. Papel que parecía encantarle al pelirrojo quien no podía evitar sostener aquella sonrisa al igual que su pistola.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Miér Dic 17, 2008 9:26 pm

- Si no vas a responderme… entonces muere junto con esa cosa que está al otro lado del espejo tras de ti.

¿El sujeto del espejo? Aún con la cabeza hecha un lío, Allen pudo saber a quién se refería, y justamente en ese instante giró el rabillo del ojo hacia los trozos de vidrio donde el decimocuarto le devolvía la mirada. Oh, así que a eso se refería. Fuese lo que fuese que había hecho aquel oscuro amiguito tras de Allen, había enojado con creces al otro Noé, que ahora todo poseso se abalanzaba contra el exorcista agresivamente.

Allen instintivamente se colocó rápidamente en la posición adecuada que le permitiría mitigar en gran medida la venida de Tyki, con la mirada fija en aquel que ahora sí que quería matarlo… por algo que sencillamente el albino desconocía.

Sin embargo, el impacto no llegó. Justo en el momento adecuado, su maestro hacía acto de presencia, con jugdment en una mano y…un pequeño cofre en la otra.

-¿Shishio?

¿Había venido él mismo por el baúl? ¿O acaso era esa pequeña cosa la que en realidad urgía por tener?

Mientras pensaba en esto, su mirada iba de Tyki a Cross, y presintió una extraña sensación de dejâ vû. Era casi la misma escena del Arca, sólo que esta vez Tyki era Tyki y no su Noé interior…además de que su maestro anunciaba claramente la retirada y no esperaba quedarse para eliminar personalmente al moreno.

Por unos momentos, dudó en qué era lo que tenía que hacer, pero luego, con paso vacilante, avanzó hacia donde estaba el odioso pelirrojo con la única intención de querer salir de allí cuanto antes… daba a parecer que había venido en vano y únicamente a recibir unos rasguños extra y gastar las pocas energías que tenía tras pasar el agotador día con vida al menos.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Jue Dic 18, 2008 7:21 pm

Fue un ¡Bang! Lo que frenó el enfrentamiento esta vez.

Los dorados ojos de Tyki rodaron inmediatamente hacía donde provenía aquella bala ahora incrustada en la pared llevando la señal de una cruz y un cuerpo femenino en ella. Sus orbes se tornaron como platos de la impresión al identificar al cuarto invitado de la noche (si cuarto, el músico también contaba). No era nada más y nada menos que Cross Marian en persona, quien llevaba en un lado del brazo un baúl clásico. Si bien los sucesos de aquella noche le tomaban por sorpresa ahora no era la excepción. La aparición del general tenía un significado, y por alguna razón llegaba a la conclusión de que era por aquella carga. Entonces… todo había sido una distracción.

Una mueca de desprecio y enojo demarcó su rostro. Odiaba siquiera pensar que había caído en alguna especie de trampa doble. Una por parte del alumno y la otra por el maestro.

Un reverendo cacahuate si pensaban que se quedaría quieto a ver como se salían con la suya.

- Así que nos volvemos a ver. Desafortunadamente tengo prisa y ocupo a mi tonto aprendiz como maletero, pero no te sientas mal!! Te daré 10 segundos de ventaja para salir corriendo lo más rápido que puedas, aprovéchalos… 1...2... 3 –

Diez segundos. Los primeros tres ocupados en pensamientos testarudos renegando definitivamente a darse a la fuga. El sonido de aquel revolver le advertía con claridad lo que venía, y estaba más que claro que por su parte era inevitable. El moreno dio a relucir una de sus sonrisas despreocupadas, posando su zurda a la altura de la cadera relajando cada uno de sus músculos puestos en tensión hace instantes. Parecía haberse recobrado de los impulsos asesinos que hacía rato lo consumían.

- Pues, siento mucho el desaprovechar tu oferta… nunca se me dieron bien las retiradas ¿nunca te dije que soy un mal perdedor? – musitó con sorna secundando el sarcasmo del general. Su mirada paseo primero del pelirrojo al chico que se encontraba a su lado como si no le quedase de otra. Por medio segundo fulminó a este con la mirada.

5, 6, 7… Ya había perdido la cuenta.

Elevó el rostro hacía el techo donde se encontraban distribuidas las mariposas de tonos púrpuras, antes limitadas solo a servir de espectadoras. Sus manos se extendieron a sus lados como si fuese a recibir a alguien invisible en sus brazos, así como sus comisuras se ensancharon a punto de deformar su rostro una vez más con una mueca macabra que suponía ser una sonrisa de triunfo.

“Tease…” – pronunció roncamente. Los golems atendieron a la llamada de su amo, y mostrando sus fauces dispararon de estas un rayo tan fino como el láser color morado eléctrico. Unos en dirección a los exorcistas y otros al techo de la estructura causando su resquebrajamiento. La lluvia de escombros comenzó a arreciar por todo el lugar, y lo que quedaba de la catedral se había reducido a nada.

Para su fortuna, las piedras pasaban lisas por su cuerpo sin causarle la menor herida gracias a su prodigiosa ~~puñetera~~ habilidad. Lastima que no podría decir lo mismo de los otros presentes y sus propias mascotas a las que acababa de sacrificar. Sin embargo, no daba por concluido el encuentro. Por lo que prudentemente dejó salir de su espalda una de las tease que aun quedaban en el interior de su cuerpo, con esta avisaría a ese panzón que todo cuanto el nivel dos había contado era cierto.

Y él se encontraba a punto de enfrentarse cara a cara con esa situación. Lo curioso es que no podía intuir un resultado favorable para el asunto si el quedaba como el único oponente.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Vie Dic 19, 2008 12:55 pm

Observando a su alumno acercarse a él pasa a dejar escapar un suspiro, más el mismo no era de alivio sino de desagrado debido al estado de su aprendiz. No solo se encontraba bastante herido sino que lucía sucio y desaliñado, cosa que para nada le agrada al pelirrojo quien por tratarse de un caso especial se limita a ignorar su estado y permitirle acercarse, aunque su rostro pierde su arrogancia adoptando un tono de seriedad. Tampoco es como que tuviera otra opción pues al observar más detenidamente a Tyki pasa a notar algo extraño… ¿Acaso era el mismo Noé de aquella ocasión? Ciertamente parecía ser el caso, sin embargo, algo le había sucedido pues lucía realmente distinto a la forma que recordaba estando sobre los hombros del molesto y dientón gordo a la hora de partir. Sus ojos se cierran para ser reabiertos retomando el momento y dejando aquellas dudas para después.

-Tch…-

Único sonido que escapa de los labios de Cross al escuchar la respuesta y posición de su rival. Observando como las tease son dirigidas en su dirección y en contra del techo de la iglesia pasa a actuar de manera veloz llevando su cañón al frente de dicho rayo para limitarse a abrir ligeramente sus orbes apuntando con excelsa precisión. Un nuevo disparo escapa de Judgement apareciendo frente a la figura del General un gigantesco círculo en cuyo interior se aprecia una enorme cruz sobre cuya imagen se aprecia un torso desnudo femenino. Dicho ataque sale a gran velocidad y con gran potencia contra el ataque enviado por el noé logrando deshacer el mismo. Mas sus problemas aún no había terminado pues los escombros del daño irreparable hecho a la sagrada edificación continuaban cayendo sin pausa alguna. Una grandísima humareda comienza a levantarse haciendo imposible que ambos exorcistas pudieran tener contacto visual con el moreno, aunque no todo eran malas noticias pues ahora Tyki tampoco podría verlos a ellos.

“No me conviene continuar este combate… necesito que ese Noé sobreviva y le informe al gordo todo lo que ha visto. Afortunadamente para mi… jhmjhm, ya tenía algo preparado.”

Piensa en sus adentros a la vez que su rostro serio retoma su habitual expresión confiada mientras lleva una de sus manos hacia el suelo empuñando una cadena que todos pasaron por alto debido a la poca atención que llamaba.

-No me agradaba la idea de dejarte enterrada aquí, pero no podía andar por Las Vegas cargándote y ahora te ocuparemos.-

Pareciera que Cross habla solo más pronto frente a Allen pasa a mostrarse con quien hablaba su maestro. La cadena es jalada para mostrarse como enterrada en el suelo se encontraba una tumba que él conocía perfectamente. Una gran cantidad de sellos mágicos pasan a rodear a ambos exorcistas mientras de la boca del general algunas palabras escapan cuales susurros inaudibles para el Noé.

-¡Grave of María!-

Y respondiendo a su llamado, la tumba pasa a abrirse de manera poco llamativa debido a la necesidad de sigilo saliendo de la misma la hermosa dama cuya agraciada figura seguía ataviada con su lujoso y llamativo vestido. Sobre su rostro una enorme mariposa de oscuros tonos continúa fungiendo cual antifaz quedando únicamente sus exquisitos labios que son abiertos para emitir una dulce melodía que va dirigida al cerebro del Noé. Es así como la defensa de Cross es activada permitiéndoles tanto al General como a su discípulo escapar de las ruinas pasando totalmente desapercibidos. El sarcófago de María es entregado a Allen para que lo cargue mientras él cómoda y cínicamente sale por la puerta principal de la Iglesia cargando únicamente el diminuto cofre.

-Ya se recuperó el objetivo y ahora Tyki irá con el Conde a chillarle su derrota y a hablarle sobre la posibilidad de que todo lo que el akuma que dejé escapar dijo sea cierto. En marcha tonto, tenemos cosas que hacer.-

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Vie Dic 19, 2008 3:53 pm

Allen, mientras cargaba aquel ataúd sin ninguna queja (sabía de antemano que no serviría de nada, cuatro años de experiencia lo certificaban sin dejar duda alguna), escuchaba atento lo que decía el pelirrojo.

No pudo evitar volver la vista instintivamente hacia atrás, con la duda de si Tyki seguiría por allí o ya se habría marchado. De igual forma, tenía bastante claro que tanto si fuese la primera o segunda opción, el no podría verles al menos hasta que su maestro dijese lo contrario.

Un nudo se le hizo en el estómago tras rememorar las escenas pasadas. El moreno se había enojado mucho, por algo que sencillamente Allen no sabía. Por algo que seguramente había hecho el decimocuarto.

¿Tanto poder ahora tenía esa cosa como para hacer algo más que observar detrás de él? La sola idea hizo que se inquietara en silencio, mientras echaba a andar junto con su maestro, fuese a donde fuese que irían. Que seguramente sería el hotel. Allen sintió la necesidad de buscar un espejo, o algo que lo reflejara para ver la realidad de las cosas. Le angustiaba el hecho de que aquel oscuro visitante hubiese tomado más terreno del que él le había permitido en algún momento donde no se había percatado.

Un rugido de su estómago le hizo perder el hilo de sus pensamientos totalmente. Hizo una mueca de dolor al percatarse de que hacía horas que no había tenido una comida como Dios manda, además de tener claro que probablemente eso sería lo que más le faltaría en esta pequeña estancia con su maestro, si es que no quería que las deudas se multiplicarán incalculablemente.

Suspiró cansadamente y dirigió una mirada curiosa a aquel odioso pelirrojo que increíblemente era su ‘maestro’.

-Shishio, ¿Qué es lo que hay adentro de ese cofre? –preguntó mirando el objeto aludido con atención. Si su maestro tanto había urgido por tenerlo, entonces debía de tratarse de algo realmente importante. O al menos daba esa impresión.

Tema: Re: A Las Vegas - Cross Roads Vie Dic 19, 2008 6:29 pm

Tal como lo había supuesto, no había nada más que revisar en aquellos escombros.

Prácticamente se había tomado aquel tiempo para reflexionar acerca de lo ocurrido, pues no prestaba ni la más mínima atención a lo que aquellos nivel dos hacían. Llevaban como una hora allí escarbando entre las piedras y los restos minerales que quedaron de la catedral, buscando algún indicio de que los dos individuos seguían tras las rocas. Solo al moreno le parecía inútil la empresa, siquiera sabía porque rayos lo hacía, era una excusa para hacer tiempo. Para pensar en lo que haría a partir de ahora, en lo que se resolvería en manos del Conde y sus hermanos.

Y sobretodo, si debía comentarle lo ocurrido de la sombra al gordinflón.

Se paso los dedos por la negrusca cabellera ahora suelta, la cual caía ondulada y dócil por sus hombros y parte de su espalda. Su mirada inexpresiva paseaba de vez en vez por los alrededores sin fijarse en nada en particular, completamente desinteresado de su entorno. En cierta parte estaba airado con el albino y la jugada del pelirrojo, y por otra bastante intrigado, al parecer en las Vegas realmente se estaba cociendo algo muy interesante, y bastante espeso al parecer; presentía que el caldo de esa sopa estaba por ponerse morado a causa de la cantidad de personas que seguramente se verían inmiscuidas en el asunto.

Él por ejemplo.

- Tsk…

Extrajo del bolsillo del pantalón un cigarro algo arrugado y doblado por la presión constante y el movimiento. Lo llevó hasta sus labios y allí lo encendió con el chasquido del cerrillo, la débil llama titiló por instantes para encender la punta del puro y luego de un solo movimiento de su mano se apagó, dejando caer el cadáver del palillo junto a los restos y el polvo de todo lo demás. Aspiró profundamente llenando sus pulmones de la dulce sensación de la nicotina, sin conseguir disfrutar plenamente del tenue placer que lo invitaba a relajarse. Siquiera el sabor de los exquisitos cigarros norteamericanos conseguían borrar el estrés que claramente se marcaba en su ceño ligeramente fruncido.

- Noé-tama evidentemente aquí no hay más nada que buscar – chilló el nivel dos que tenía aspecto de cocodrilo trazado en caricatura versión humanoide. “¿Enserio? Ya lo sabía idiotas… no se ni porque les dije que buscaran”

- Cierto Noé-tama… no hay rastro de los exorcistas por aquí tampoco – dijo el otro con figura de varias formas geométricas que constituían su cuerpo amorfo. “¡Brillante! Ya el otro lo dijo, tu pudiste haberte quedado callado”.

- Noé-tama ¿Desea que sigamos buscando, o que investiguemos en la ciudad? – intervino un tercero con figura de… ¿Era una calabaza su cabeza o eran ideas suyas?. “Suena inteligente la sugerencia, pero si yo fui engañado por ese sujeto ¿qué me dice que no les ocurrirá lo mismo a ustedes par de máquinas estupidas?”

- ¿Noé-tama? – inquirió el polinomio. Realmente empezaba a detestar la voz chillona y mecánica de los akuma.

- Diríjanse al arca y esperen a que se les ordene algo – declaró el moreno entrecerrando sus doradas orbes, conservando la poca tolerancia y paciencia que le quedaba después del encuentro. Los akumas asintieron y en pocos instantes desaparecieron en las nubes del cielo perdiéndose de vista completamente, dejando solamente al Noé del placer en el escenario en ruinas.

Tenía ganas de matar a alguien…

Ya pagaría su rabia con algún desdichado, fuese de su familia o un exorcista. En ese momento le importaba un bledo quien tendría que aguantarlo hasta que toda su frustración mermase. Presionó la boca del cigarro con los dientes con rudeza y luego lo escupió al suelo como si le asqueara ya el sabor de la nicotina. Hizo una mueca de repulsión y desprecio hacía todo lo que le rodeaba, sabía que necesitaba aclarar sus dudas y pensamientos en un lugar que supusiera más comodidad y relajación. Algo que realmente calmara todas esas emociones desbocadas y le fuese más fácil pensar con claridad. Si que había que pensar.

Y que rendirle al Milenario al llegar al arca.

[-Cambio de escena-]

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