En Barcelona - Cross Road's

Tema: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 08, 2009 6:13 pm

Desembarcó en el puerto del pueblo más cercano a la ciudad de Barcelona, que a su vez limitaba con el mar mediterráneo. Para llegar al punto inicial de dónde se guiaría para su búsqueda se valió de una de las carretas que partían justamente para allá, la cual era conducida por un hombre con su familia y que, humildemente le invitó a subirse.

Allen se pasó las siguientes horas hablando con los señores y entreteniendo a sus hijos con los tan consabidos trucos que siempre llevaba bajo la manga, literalmente. No por nada había hecho el papel de Pierrot en sus años con Mana, ni había pulido muchas técnicas con las cartas de mesa para sobrevivir al síndrome de despilfarro crónico que llevaba su Maestro padeciendo, seguramente desde que le habían mencionado por primera vez en su vida la palabra 'dinero'.

No tardó en asomarse en ambos e inocentes pares de ojos un brillo de admiración por el peliblanco, así como de simpatía que Allen con mucho gusto correspondía. La mujer no se quejó en ningún momento por la confianza que se podría estar tejiendo entre los críos, más si pareció satisfecha por el amable comportamiento del muchacho para jugar con ambos hijos. Aquella familia parecía ser de una clase social muy cercana a la pobreza, y quizá lo eran.

-Les agradezco mucho su amabilidad por haberme permitido estar con ustedes en el viaje y poder llevarme a Barcelona -musitó respetuosamente al cabo de seis horas desde la primera vez en que se había cruzado a la pareja con sus hijos, ya en la entrada a la ciudad y fuera de la carreta. Acto seguido se inclinó haciendo una zalema como acto de cortesía.

-No a sido nada…Gracias a ti, muchacho -respondió el hombre algo incómodo por la actitud del albino. Obviamente él no estaba tan acostumbrado a las formalidades.- Mis hijos no se habían divertido tanto en un viaje como hoy. Normalmente se la pasan callados o durmiendo, y siempre están aburridos.

-Se ve que son unos buenos chicos -comentó Allen mirando por encima del hombro del señor; los niños jugaban por última vez con Timcanpy que volaba en lo alto y esquivaba torpemente las manitas que intentaban capturarlo a propósito. Ellos reían, y si Tim hubiese podido hablar, seguramente también reiría. Una sonrisa brotó de los labios del albino.

La esposa salió entonces del interior de la carreta y antes de sentarse al lado de su marido, le estiró una bolsa de cuero al exorcista.

-Dentro hay unas cuantas rodajas de pan de viajero y galletas. Es todo lo que le puedo dar en agradecimiento, Allen-san -la sonrisa de aquella mujer deslumbró al peliblanco. No había ni un sólo rastro de maldad en aquel gesto.

-¿Huh? No tenía por qué molestarse -replicó con sincera perplejidad- No hice nada en especial.

-Al contrario -debatió la mujer- Ha hecho a mis hijos felices por varias horas, y por ende nos ha alegrado a nosotros; esto comparado con lo que se merece es poco.

-E-eh. No diga eso, me avergüenza señora -un leve rubor asomaba a su mejillas, mientras desviaba la mirada hacia otro lado para no verse en evidencia.

La mujer rió y su esposo se le unió. Timcanpy entonces sobrevoló y salió de la carreta directamente hasta donde estaba Allen; los niños ante esto se asomaron tras darse cuenta que la hora de la despedida era inminente.

La esposa se acercó al exorcista y depositó el saquito en sus enguantadas manos, suavemente.

-Acéptelo por favor, Allen-san.

A él no le quedó de otra, y se guardó el obsequio en uno de los bolsillos de su pantalón.

-Gracias por todo -repitió el chico- Ustedes han sido muy amables.

-Cuídate mucho, Allen -dijo la hija menor, agitando la mano en despedida.

-Espero que nos volvamos a ver algún día -adjuntó el mayor imitando a su hermana y sonriendo.

-Ustedes dos, cuídense también -Allen les dirigió una sonrisa amigable que hizo ruborizar a la hermanita menor. El mayor rió sonoramente al darse cuenta y recibió rápidamente un golpecito en la cabeza por su semejante que se mostraba ahora apenada.

La carreta por fin se alejó, dejando al chico parado en medio de la entrada a Barcelona y aún agitando la mano en alto como última seña de despedida. Unas grandes maletas las cuales no le pertenecían eran su único equipaje, además del otro pequeño maletín que sí era suyo y el consagrado cofre que debía cuidar con su vida misma.

Llevaba consigo algo de dinero, con el cual planeaba pagar el hospedaje en alguna humilde posada. Más que todo para no andar cargando tantas cosas en su búsqueda por Madame Julieta.

El lugar en donde se quedó estaba a tres cuadras del antiguo lugar donde trabajaba la mujer, en los suburbios, y era idéntico a los mismos sitios donde pasaba la noche en sus misiones. Nada ostentoso, pero no sobrepasaba la frontera que delimitaba la clase media de la pobreza.

Después de dejar el equipaje en su habitación, reposó un rato sobre la blanda cama y ya cuando culminaba por fin el medio día, dándole paso a la tarde, se incorporó y salió en busca de la Madame, tal cual como le había indicado su maestro. Siempre, por supuesto, llevando consigo el cofre.

Dio sus primeros pasos yendo al antiguo lugar donde la mujer había montado su 'negocio', esperando poder encontrar indicaciones que le señalasen en dónde se encontraba ahora, y si tendría que hacer otro viaje hacia otra ciudad.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Vie Ene 09, 2009 11:21 pm

No había pisado el suelo de Barcelona desde que asesinó a aquel exorcista de la campana. Y ahora que la ciudad retomaba su ritmo normal después de aquel desastre le parecía que nada de aquello había pasado, ni la masacre de buscadores de la orden ni la búsqueda del general. Las calles eran concurridas por sus habitantes quienes iban por las calles unas en sentido opuesto a otros, formando una fila similar al de las hormigas cuando trabajan. El cielo se encontraba bastante claro, despejado y con algunas nubes blancas que hacían del paisaje más fresco y menos caluroso por el verano. Si giraba a su derecha o a su izquierda se encontraba con múltiples puestos humildes con mercancía bastante fresca propia de las clases rurales. Más adelante por la angosta calle seguirían los negocios de prestigio medio-alto, aquellos que con mucho trabajo o una buena untada de pasta consiguieron un establecimiento propio con productos mejor elaborados y de precios más elevados.

A conciencias de que a sus espaldas iría la joven hechicera cual fiel sombra, el moreno no podía reprimir aquella expresión de gusto que proporcionaba la sensación de la libertad, el volver a pisar aquellas calles en la forma humana le traía recuerdos que en aquellos momentos parecían bastante lejanos… solo conseguía ver las siluetas, los rostros de sus viejos compañeros habían empezado a perder su forma con el paso del tiempo, como si hubiese pasado más de veinte o treinta años en lugar de unos meses.
Pensar en ello suponía un dolor de cabeza, y Tyki Mikk no tenía tiempo para lidiar con la migraña ahora. Su trabajo era barrer la zona y encontrar algún indicio del peliblanco y el corazón, o de Cross en su defecto.

Introdujo las manos en ambos bolsillos con desgana mientras a su vez ladeaba el rostro hacía sus espaldas donde buscaba el rostro de su acompañante, con la intención de preguntarle el si había encontrado algún indicio del enemigo o pistas de sus andanzas, pues él entre la multitud no sentía nada a sinceridad. La expresión de sus ojos achocolatados denotaba la pregunta que le formulaba a Isabella, cual fuese la respuesta bastaría un gesto para comprenderlo.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Sáb Ene 10, 2009 3:14 am

Camino a espaldas de Tyki mientras observaba la ciudad atentamente y de manera tranquila tratando de captar alguna señal de la inocencia del muchacho o del General, al principio no lo logro pero mientras se adentraban en la ciudad, una leve presencia de aquella sustancia sagrada llego a sus sentidos.

Miro nuevamente al frente para informarle al Noé, sin embargo este se le habia adelantado ya que miraba de reojo esperando algun gesto de parte de ella, sonrio en sus adentros, le impresionaba la agilidad de la mente de Tyki, lo miro fijamente y asintio con la intension de comunicarle que el enemigo no estaba lejos de ellos.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Dom Ene 11, 2009 1:19 am

Lo que antes era el costoso y más reconocido burdel en Barcelona, cuyo dueño era nada más ni nada menos que Madame Julieta, ahora era un restaurante italiano muy caro y lujoso. Al muchacho le impresionó en sobremanera el gran cambio que había tenido el local. Habían remodelado todo, incluso habían pintado las paredes y techo de un color más serio y ampliado el lugar tumbando algunos muros que aún se mantenían almacenados en su memoria. Las mesas estaban distribuidas ordenadamente por el salón que ahora ofrecía más amplitud y las lámparas en el alto techo proferían una tenue iluminación para hacer más amena y familiar la estancia. Cualquier otro mueble estaba tallado en madera caoba, y revestido por finas telas y acolchados de ricos bordados en hilos de seda.

El olor dulzón de la salsa de carne, vainilla, marrasquino y ron flotaba en el aire, casi como una nube aromática.

Por primera vez en el día, Allen sintió verdadera hambre.

-¿Puedo ayudarle en algo, joven? –le preguntó un camarero que se había acercado hasta a allí. El chico dirigió su mirada hacia él, casi curiosa. Lucía el típico traje de su profesión incluida la servilleta en el brazo que cruzaba casi en pose sobre su pecho.

-Ah, ummm... Quisiera hablar con el gerente del restaurante, por favor.

La combinación del cargo como ‘gerente’ con el verbo ‘hablar’ pareció despertar algún tipo de reacción en el camarero. Este alzó una ceja, tratando de ocultar su sorpresa.

-¿Hay algún problema con nuestros servicios, señorito?

-No exactamente –se apresuró en decir el albino-, sólo que hay algunas cosas que necesito saber. Lo más seguro es que él sepa responder correctamente a mis dudas, sólo… sólo eso.

Esbozó una sonrisa expectante, transmitiendo la idea de que en realidad no era nada malo, y que se diera prisa en aquella demanda, por el amor de Dios.

Sin embargo, el camarero antes de acceder, pareció pensárselo más de una vez. Allen se pasó el rato mirándole directamente a la cara sin deshacer el gesto ansioso acompañado de la curvatura de sus labios, para ejercer presión.

-De acuerdo –dijo al final con sequedad- sígame, joven.

El hombre emprendió su andar con largos pasos y Allen lo siguió en silencio hasta el fondo del local. Tras haber pasado por la zona de caja, la cocina, y el almacén, lo condujo hasta el umbral de la habitación más aislada del establecimiento. Abrió la puerta e ingresó él primero, y un aire frío que acarició las mejillas y cuello del albino salió de allí.

-Señor Benedetto, hay alguien que requiere de sus servicios y urge hablar con usted –habló el camarero con dócil respeto.

La estancia se quedó sumida en silencio durante unos segundos. Allen aguardó, más nervioso que ansioso ahora.

-Hazlo pasar –ordenó una voz ronca desde la habitación que el muchacho no había oído jamás.

Allen hizo muestra de su propia iniciativa, entrando incluso antes de que el camarero se lo indicara.

A diferencia del restaurante, la oficina del gerente era mil veces más clara e iluminada. La lámpara que oscilaba sobre sus cabezas era de tal intensidad que a Allen le costó al principio adaptarse. Entrecerró los ojos, sintiendo sutilmente su mirada lastimada por el brusco cambio.

El lugar apestaba a habanos y a su tóxico humo, y contando con que el lugar era bastante reducido, hacía que dicho olor se mostrase concentrado en altas cantidades. La eficiente ventilación que casi convertía en hielo la habitación, parecía no ser capaz de combatir aquel hecho.

Sentado detrás del escritorio, un tipo gordo y de complexión gruesa lo examinaba con una mirada desconcertada y crítica. Su incipiente barriga sobresalía incluso de la sedosa camisa de botones que llevaba puesta, amenazando con arrancar algunas de las pequeñas piezas. Fumaba uno de esos enormes habanos que viciaban el aire sin contemplación. Ni el lugar, ni el hombre le agradaron al muchacho con la primera impresión.

Eso declaraba una actitud al mero estilo póker activada.

-¿Qué es lo que quiere hablar un crío conmigo? –espetó el gerente casi con desagrado mientras se removía en su asiento. El camarero anunciaba la retirada sigilosamente.

-Primero que nada, permítame presentarme –Allen trató de armar una sonrisa en su boca por educación.- Mi nombre es Allen Walker. En este momento, ¿Con quién tengo el gusto de hablar?

-Federico Benedetto –gruñó malhumorado- ¿Qué es lo que quieres, muchacho? Estoy muy ocupado y no tengo tiempo para charlar con niños en este mismo instante.

Un asomo de inocencia se reflejó en los orbes del muchacho. Dentro se estrujaba los sesos tanto por el deseo de salir cuanto antes de aquel sitio, como de acabar la conversación con aquella desagradable persona.

-Verá señor Benedetto –Allen vaciló- Me gustaría saber información acerca de la mujer que anteriormente ocupaba este local como dueña.

El hombre más que impresionado, pareció extrañado. Una mirada perspicaz fulminó al albino a través de los pequeños y entrecerrados ojos del mayor.

-¿La que había montado un burdel en este establecimiento hasta hace un año? …¿Julieta Arriechi?

-La misma –asintió y, extrañamente, el porte educado y las sonrisas formales empezaron a salir con más facilidad que antes.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Dom Ene 11, 2009 7:25 pm

Comprendió en el acto lo que aquella mirada sin parpadear significaba, a lo cual asintió levemente con la cabeza dándose por entendido. Volvió la vista hacía el frente mientras ambos continuaban por la misma calle concurrida de personas de todas las clases, ya fuesen habitantes o extranjeros la diferencia entre ambos era notoria. Se llevó la diestra al mentón acariciándolo de forma pensante, si aquella invaluable inocencia estaba tan cerca ¿cómo era que no vislumbraba al albino por ninguna parte? ¿Estaría en el interior de algún local? ¿Se habría escondido? El mirar a ambos lados no le ayudaba a encontrar algo que se asemejara al sitio donde quizás estuviese escondido, sus suposiciones no eran lo bastante fiables como para tomar una iniciativa.

Hasta que sus pasos los llevaron fuera del mercado y en la ruta solo se vislumbraban los negocios de prestigio medio-alto. Justo en esos instantes un aroma bastante atrayente dilató las aletas de su nariz, el olor de la carne asada recién hecha y la salsa de albóndigas hizo que su estómago se revolviese con saña. Se detuvo derepente justo al la entrada de un prestigioso restaurante italiano el cual desde lo que se veía en el exterior parecía bastante acogedor, y el delicioso aroma de la comida recién hecha era aun más intenso. Al parecer era la hora de servir la pasta.

Sabía mejor que nadie que no era el mejor momento para comer, pero con todo lo que había pasado en Norteamérica y en el acontecimiento en Edimburgo que le antecedía, no había comido desde la con el milenario y solamente el trabajo y aquella frustración le habían distraído de sus propias necesidades. Dirigió la mirada hacía Isabella quien seguramente ya estaría junto a él después de percibir su repentina parada.

- ¿Te parece si comemos algo antes? – le pregunto a la chica con suma despreocupación, como si estuviese hablando con alguien cercano y no con un subordinado. A los únicos que trataría como tales serían a los akuma o a algún faldero humano del Conde, pero para él los hechiceros del Círculo eran otro cuento, ellos tenían con que darse a respetar dentro de las fuerzas del Milenario – a decir verdad tengo bastante apetito, hasta ahora no me había dado cuenta – agregó mientras veía llegar al camarero que tiempo atrás había atendido al niño albino antes de su llegada en planes de recibimiento. Las galas que solía vestir solían destacarse tanto a punto de darle cierto aire aristócrata por lo cual aquel empleado intuiría que él y su acompañante pertenecerían a la clase social alta y por lo tanto, facilitaría el que le diesen la mejor mesa si era posible.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Dom Ene 11, 2009 10:14 pm

Siguio caminando, a pesar de haber sentido la presencia de la inocencia no sabia con exactitud en donde estaria, eso la dejo algo insatisfecha, mientras miraba hacia adelante noto como el Noé se paraba en seco, esta se acerco a el y recibio la repentina pregunta-

-por mi esta bien Tyki-sama- respondio mirandolo- ademas tal vez en uno de esos golpes de suerte encontramos al chico que buscamos ya que por lo que he oido tiene un gran apetito- exclamo viendo cualquier posibilidad-

Caminaron hacia un restoran donde el camarero al verlos se acerco sin demora a darles la bienvenida, hizo una reverencia y estiro el brazo dejandolos ingresar, el Noé e Isabella ingresaron al establecimiento, el camarero les guio a una de las mejores mesas que tenia y coloco sobre la mesa uno de los mejores Vinos, finalizo sus servicios pidiendo la orden de ambos-

Sin embargo, Isabella logro percibir que la inucencia no estaba lejos, dirigio una mirada seria a Tyki, el muchacho estaba cerca.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Dom Ene 11, 2009 11:18 pm

La habitación se quedó repentinamente en silencio.

Federico miraba cada vez con más desconfianza y repentino nerviosismo al muchacho, que a su vez le sonreía con cada minuto que pasaba con más facilidad. Por primera vez al hombre se le fueron las ganas de seguir fumando sus habanos, por lo que el que tenía en la boca terminó sacándoselo y colocándolo en el cenicero de cristal que tenía en su escritorio, no sin antes apagarlo.

Allen seguía mirándole igual a como hizo con el mayordomo. Sonreía, y a su vez daba a mostrar cierto aire expectante que ejercía presión en que el hombre se diese prisa en hablar y decirlo todo para poder marcharse. Benedetto de pronto sintió la misma urgencia del albino por que saliera del despacho. Mientras más rápido se iría, mejor.

-Julieta Arriechi… -el hombre pronunció el nombre de la mujer con cautela, y Allen no cambió un ápice su gesto de premura. Entonces se removió en su asiento con ansiedad y clavó su mirada directamente hacia el plateado de los ojos del exorcista donde podía observarse reflejado en ellos.- Hace nueves meses que no vuelvo a escuchar mencionar su nombre en este establecimiento, muchacho. Hasta ahora, que has llegado tú y has revivido su recuerdo nuevamente. Dime, ¿Qué es lo que quieres saber de ella?

Allen pareció pensárselo antes de responder.

-Solamente quiero saber en dónde se encuentra en este momento. Necesito ir a verle cuanto antes, señor.

-Oh, bueno. Si es sólo eso, entonces puedo ayudarte –se apresuró en contestar el hombre. Se levantó pesadamente de su sillón, haciendo un poco de ruido y salió de su escritorio- Recibí emmm… algo de información acerca de ella y su paradero hace seis meses. La dirección exacta de dónde se hospeda ahora se encuentra en la vieja oficina que tenemos, que es donde guardamos los archivos… poco relevantes. Iré a buscártelos enseguida.

¿Un gerente siendo diligente con un chico de apenas quince años de vida? En verdad Federico debía de desear con todas sus fuerzas que la visita del exorcista fuese corta. Allen se preguntó por qué. ¿Conocía de mala manera a la mujer que él buscaba y por eso lo quería fuera? ¿Había algo más?

-Lo esperaré entonces, señor –respondió el chico brindándole la misma sonrisa tranquila que, en vez de apaciguar al adulto, sólo consiguió ponerlo más nervioso. A los ojos del italiano, aquella mueca parecía de alguna manera inocentemente macabra. Macabra tras estar implicada con hechos que sencillamente el no quería recordar.

-Volveré de inmediato…-vaciló- Allen.

Salió de allí y respiro hondo. Sus pesados pasos se dirigieron entonces a la oficina antigua, que quedaba más o menos al lado de caja. Cruzó el almacén y la cocina sin mirar a nadie en especial, manteniendo la vista fija hacia delante.

Cuando pasó por la caja, dirigió de soslayo una mirada, pudiendo observar el establecimiento que con tanto trabajo había logrado hacer famoso. Muchas personas de la alta sociedad iban hacia allá, así como los de la clase media en momentos verdaderamente especiales. Aquel hombre entrando en compañía de una jovencita que vestía un traje carísimo con sombrero de copa adicional lo daba a mostrar. Estaba orgulloso de su negocio, y no dejaría que algo como él y su relación con la mujer que aquel chaval buscaba, que estaba enterrada en el pasado lo dejasen en la ruina por la presencia del mismo.

Ahora que lo pensaba mejor, ¿Aquél crío tenía el cabello blanco?

-Si es un demonio el que me ha visitado, entonces lo echaré con agua bendita si no se larga de aquí –murmuró el hombre para sí mismo mientras introducía una llave en la cerradura de la puerta hacia la oficina antigua- Pero primero veré si logro hacer que se marche dándole lo que quiere. Sí señor.

Y entonces entró en el oscuro despacho.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Lun Ene 12, 2009 9:29 pm

La entrada del moreno de porte esbelto y elegante acompañado de la delicada doncella que le precedía en sus pasos llamó la atención de la mayoría de los clientes, quienes solo interrumpieron sus bocados de manjares culinarios o conversaciones con sus acompañantes para alzar la vista y fijarse en aquella pareja singular. En Barcelona la gente de alto prestigio solía conocerse entre sí y al parecer nadie lograba identificar la procedencia de lo nuevos clientes. Era bastante inusual. Pero aquello no había sido lo único que llamaba la atención, las damas de diferentes edades que se encontraban en el local rendían tributos con la mirada a la figura del elegante varón.

El camarero les dio la mejor mesa tal cual como lo había supuesto. Ambos tomaron sus respectivos asientos uno frente al otro justo para dos. Un segundo camarero había servido una copa de vino al mayor y a la joven estaban por traerle una bebida más acorde a su edad. Tyki solo apoyó sus manos enguantadas en el borde de la mesa entrecruzando los dedos de ambas. Extendió una de estas hacía la copa, la cual tomó con sutileza y elegancia para llevarla a los labios y tomar un breve sorbo después de haberse deleitado con el exquisito aroma del líquido, su paladar se deleitó unos instantes con el embriagante sabor del vino italiano para luego dejarlo pasar por su garganta. Finalizado el ritual dirigió sus orbes oscuras a la joven, en la cual notó aquella seria expresión cuyo significado ya tenía previsto, a lo cual esbozó una despreocupada sonrisa que igualaba su satisfacción. Al parecer la suerte sonreía al Noé de buena manera en aquella ruleta de la fortuna.

- ¿Puedo tomar sus pedidos? – inquirió el camarero de forma educada tomando la debida atención a ambos – tenemos lo mejor en pasta italiana y demás platillos propios de este país, contamos con la calidad del mejor cheff de la ciudad – agregó bastante satisfecho de sus propias palabras mientras extendía a ambos la carta del menú, que venía forrada por un encuadernado negro acolchado, en la cual estaban transcritas en dorado la lista de platillos de los que gozaba el local. Tyki apartó la cartilla después de haberla leído sin muchas vueltas para dirigir su mirada nuevamente a su compañera.

- ¿Qué deseas comer, Isabella? – preguntó con tranquilidad el Noé, con el mismo humor despreocupado y fresco que había mantenido durante la travesía. En sus labios la misma sonrisa relajada se mantenía como si fuese parte del mismo rostro de él, totalmente natural.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Mar Ene 13, 2009 6:42 pm

A pesar de que el joven Noé habia entendido su mensaje se mostro relajado, al principio no lo entendio pero decidio que lo mejor era dejar que Tyki manejara esto a su manera por lo que por ahora disfruto del momento, bebio un poco de la bebida que se le habia servido-

-Ravioles de Ossobuco.....-dijo respondiendo a su pregunta- siempre....me han gustado....-termino agregando-

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Mar Ene 13, 2009 11:37 pm

Siete minutos después, el hombre regresó con una carpeta marrón algo ensuciada de polvo en sus manos. Su rostro era grave y serio.

-Tienes suerte, muchacho. La señorita Arriechi no se ha ido al otro lado del mundo al menos.

De allí sacó una hoja que le alcanzó al exorcista sin la menor intención de hacer algún contacto con él físicamente. Allen no le prestó atención a ello y tomó lo que se le ofrecía tranquilamente y con un gesto pacífico e inofensivo en el rostro.

El papel indicaba la dirección de tres tiendas de perfumes recién fundadas en la capital francesa, además de la de un bar de alta sociedad que ofrecía los mejores servicios y licores al público en general (preferiblemente de la alta sociedad, por supuesto), así como “entretenimiento”. Daba a entender que Julieta no se había mudado de allí exactamente por faltas económicas; todo lo contrario, había logrado obtener una buena suma con la cual hacer, además de un bar, otro de los negocios que verdaderamente eran fructíferos allá en Paris. Una parte del cerebro de Allen no se sorprendía de ello; ese era exactamente el tipo de mujeres con las cuales su maestro se mezclaba.

-¿Y bien? –Federico rompió el pétreo silencio con un tono de voz casi desesperado- ¿Era eso todo lo que necesitabas?

Allen alzó los ojos de su lectura y se fijó directamente en su interlocutor. Su expresión se tornó amable y satisfecha, enlazadas por una sonrisa amistosa. Otro escalofrío para Benedetto.

-Sí. Agradezco mucho su ayuda, señor. –Respondió y entonces se levantó de su asiento y se quedó allí parado mientras pensaba en algo- Ummm, ¿Podría quedarme con esta hoja? Si la necesita lo entenderé…

-Oh, no, no, no.-repuso el hombre ipso facto- Puedes quedártela, chico, por mí no hay problema.

El albino parpadeó perplejo por la reacción del hombre. Vaya, qué gerente más extraño era con el que se había topado.

-Ummm. Vale, está bien. Muchísimas gracias.

El hombre casi suspira de alivio. Aquel muchacho estaba por irse, dejándolo a él tranquilo. Ahora podría reclinarse en su asiento cómodamente y encender con toda la serenidad un habano de los suyos para así olvidar aquella escena como si nunca se hubiese producido.

Pero el chico se detuvo justo cuando tenía sujeto el pomo de la puerta, dispuesto a salir.

-Federico-san. Disculpe si le molesto con la pregunta, pero, ¿Acaso conocía usted de algo a Madame Julieta?

Y entonces la sangre se le fue de la cara al gerente.

[Off: les dejaré comer tranquilitos xD]

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 15, 2009 1:46 pm

Entonces el Noé sonrió satisfecho.

- Raviolis de Ossobuco – asintió mientras el camarero a su lado tomaba nota del pedido de la joven hechicera – y a mí tráeme espagueti con salsa boloñesa y queso parmesano – agregó el caballero portugués para terminar con el pedido. El camarero se dio por entendido mientras acababa de mecanografiar sobre la libreta de pedidos, alzó la mirada para comprobar si eso sería todo lo que pedirían sus nuevos y distinguidos clientes. El moreno le dedicó un gesto amable y educado mientras finalizaba – es todo por los momentos.

- Traeré vuestros pedidos de inmediato – afirmó el hombre de porte elegante y servicial – si necesitan algo más no duden en llamarme – agregó emitiendo una corta reverencia a modo de respeto por los clientes. Ahora Tyki empezaba a entender porque la gente más adinerada de Babilonia venía hasta aquí, con el trato de reyes que se llevaban era la manera perfecta de embobar a la clientela. Al menos a que ambos fuesen un caso especial cosa que dudaba.

- Seguro que sí señor – asintió el moreno relajadamente mientras el camarero se perdía entre las mesas y se dirigía a la barra que conectaba a la cocina por una ventanilla. Conociendo como funcionaban la mayoría de los restaurantes italianos supondrían que no tardarían en tener su pedido en la mesa, solo si corrían con algo de suerte. Ahora su mirada rodó del interior del restaurante al rostro de su compañera, a quien hasta los momentos notaba más relajada desde que le invitó a seguirle el juego y dejar lo demás por su cuenta. Los dedos de sus manos entrelazadas se movían a modo de entretenimiento mientras de vez en vez posaba sus orbes en algún rincón del interior. Ni un solo rastro del albino.

- Esperemos a que llegue la comida y tratemos de relajarnos un poco – dijo Tyki para romper un poco el silencio que mantenía con su compañera, justo cuando sus dedos dejaron de moverse. Esbozó una sonrisa tenue y despreocupada como si con ello invitara a Isabella a que también se relajase un poco. Estaba confiado de que encontrarían al chico tarde o temprano. Él tenía un don para los encuentros con ese exorcista que por lo general siempre terminaban de forma demasiado dramática.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Vie Ene 16, 2009 11:40 pm

-Me parece bien-Asintio ante el ofrecimiento del Noé y se apoyo en el respaldo de la silla observo el lugar con detenimiento, todas las miradas que se centraban en ellos pero al notar que Isabella los miraba retomaron sus comidas y sus asuntos, bebio un poco mas de su bebida y luego miro a Tyki-

-le....agrada la comida Italiana?- le pregunto con respeto, de igual manera tratando de romper el silencio-

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Dom Ene 18, 2009 7:04 pm

A la luz de la esplendorosa lámpara que colgaba en la habitación, la faz del gerente languidecía a un aspecto demacrado, incluso peor al que padecía el peliblanco en la mayoría de las temporadas donde estaba en compañía con su maestro y sus endemoniadas deudas.

Federico se desplomó en su asiento casi ausente, como si en su interior se estuviese reproduciendo una película poco agradable de la cual no podía escapar. Los minutos transcurrieron, y el silencio pareció imponerse durante ese rato. Allen entonces sintió que en realidad, ahora sí que había metido la pata.

-Esto. Si no quiere responderme no lo haga, en serio –arrepentido de su atrevimiento, el muchacho ya no veía el momento para irse.

El hombre, aún con la sorpresa en su rostro, alzó los ojos hacia él lentamente.

-Chico…sólo vete. –Murmuró el hombre- Ya tienes lo que querías, ahora vete de aquí. No quiero seguir hablando acerca de esa mujer. V-vete.

-¡Ah! Esta bien, esta bien. –Sin chistar, Allen abrió el pomo de la puerta casi en un parpadeo.- No lo molestaré más. Muchas gracias por todo, señor Federico.

El hombre no respondió, y Allen no esperó a que hablara para irse. Inmediatamente cerró la puerta tras de sí y emprendió la marcha él solito hacia el restaurante. Luego de salir de allí, se dirigiría inmediatamente a la posada donde había pedido hospedaje y recogería sus cosas. Acto seguido, se marcharía rápidamente hacia Francia para así encontrarse con Madame Julieta. Después de eso, a saber qué después pasaría. Sólo sabía que tenía que proteger del ‘Corazón’ (cerciorarse de la veracidad no estaba de más en sus propios planes) mientras su maestro actuaba allá en América.

Antes de cruzar tranquilamente la barra donde estaba la caja, alguien le jaló fuertemente del cabello.

-¡Ouch! Tim, ¿Por qué has hecho eso? –le espetó el peliblanco a su camarada dorado. El Golem apuntó con un ala en dirección a una de las mesas del fondo del establecimiento. Allen siguió con la mirada lo que Timcanpy quería mostrarse y sufrió un momentáneo ataque de shock.

Allí estaba, inconfundiblemente el Noé del Placer junto con otra muchacha que Dios sabría quién era.

Al parecer no se habían percatado de su presencia, por lo que rápidamente se escondió detrás de caja, sin prestar atención a la mirada confusa que le dirigió el cajero en aquel momento.

"¿Ahora qué hago? ¿Cómo saldré sin que ellos logren verme?" Pensó el muchacho mordiéndose la punta del enguantado dedo pulgar diestro y sin apartar la mirada de aquello que seguramente estarían buscándole. “El Conde ha comenzado a moverse” era algo lógico, y seguramente acertado con la situación actual.

Entonces Timcanpy volvió a llamarle la atención, mostrándole la salvación personificada con una sola ala, apuntando al lado opuesto del muchacho.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Lun Ene 19, 2009 8:31 pm

La comida no se hizo esperar. En menos de diez minutos aproximadamente el mesero se encontraba con un carrito de acero donde llevaba las respectivas ordenes de los distinguidos clientes. Colocó cada plato en su respectivo lado frente a cada uno, dejando que primeramente el aroma y vapor de los platillos deleitasen primeramente el olfato de ambos, dilatando las aletas de la nariz y permitiéndose de saborear la comida primero con el aroma. El señor se retiró con una cortés reverencia llevando consigo el carrito donde depositaba los demás pedidos.

- Pues si, es uno de mis estilos de comida preferida – respondió a la pregunta de la hechicera con suma naturalidad mientras su mano tomaba correctamente el tenedor junto con la cuchara y apoyándose de esta enroscaba una porción de los espaguetis con salsa de carne y algunas albóndigas sueltas. Abrió la boca dejando paso al bocado, el cual masticó con lentitud haciendo caso omiso al calor cuya molestia podía rechazar hasta que no le incomodase al paladar. Estaba demasiado tranquilo y hasta los momentos solo se permitía el disfrutar de la comida. Hasta que las hebras blancas de cierta personita hicieron que casi se atragantase con el bolo alimenticio que estaba por tragar.

Solo fue un instante, un afortunado instante en el cual podría haber disimulado incluso el no haberle visto, ¿nadie tendría que saber que su vista periférica fuese desarrollada, no? Su faz era tan llena de despreocupación que no quedaría duda de ello. Fingió un breve ataque de tos mientras usaba la servilleta para tapar su boca y atrapar los posibles restos de comida que saldrían acompañados de las chispas de saliva inoportuna. Unos toquecitos en los labios para apartar los restos y limpiarse y todo continuaría de manera natural. Que buen actor era.

Ya no lo veía. Seguro se habría escondido en algún sitio buscando la manera de escapar del restaurante “sin ser visto”. Acabó por hacer una seña con los ojos a Isabella mientras se reincorporaba de su asiento con elegancia y dejaba la silla dentro de la mesa. Le dedicó una amable sonrisa que en realidad decía más de lo que se leía.

- Vuelvo en un momento – le dijo para luego apartarse de la vista de todos, con pasos rumbo a lo que sería el baño de hombres.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Lun Ene 19, 2009 9:32 pm

Delicadamente acerco su mano derecha al tenedor para tomarlo, aspiro el delicioso aroma de la comida y acercando el utencilio a uno de los raviolis, para luego llevarlo hasta su boca, se deleito con el exquisito sabor de la comida, luego miro al Noé que habia comenzado a toser.

Despues de terminar de masticar trago la porcion y tomando una servilleta se limpio los labios aprovechando de preguntarle si estaba bien sin embargo este le dio una mirada, la cual supo interpretar muy bien.

-acaso....-susurro y sigilosamente recorrio el restoran con la mirada pero sin resultado alguno del peliblanco, finalmente Tyki se excusó para retirarse al baño, Isabella asintio quedandose en su asiento y atenta de cualquier aparicion del muchacho-

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Mar Ene 20, 2009 7:30 pm

Lo que Tim le había mostrado a Allen era la entrada a la vieja oficina que minutos atrás, Federico había abierto para buscar y llevarle la información de dónde se encontraba Madame Julieta. La puerta había sido cerrada con tanta prisa y descuidado, que el italiano no se percató de que la misma rebotó con el marco de la puerta en vez de cerrarse. En realidad, el gerente había pasado seguro al portal mientras yacía abierto puesto que del otro lado no había picaporte, y él no estaba dispuesto a arriesgarse en quedarse encerrado allí.

A Allen no le llevó ni diez minutos actuando.

Antes de ingresar en el despacho gateando, para así no ser visto, el muchacho se inclinó en su lugar al lado la caja (quién atendía todavía le tenía la vista fija, pero sin decir nada. Aparentemente aquello resultaba de lo más interesante), por unos instantes, intentando alcanzar algo que le había llamado la atención. Cuando ya se encontraba en aquel estrecho cuarto (que estaba más oscuro que la boca de un lobo) se quedó mirando la ventana del lugar por un buen rato, pensando. Estaba cubierta por una cortina de color púrpura, por lo cual no brindaba ningún tipo de iluminación, pero allí estaba. Manos a la obra.

En medio de la oscuridad que se veía a través del paso libre que dejaba la puerta abierta, unos mechones blancos saltaban muy levemente a la vista, casi sin que fuesen capaces de ser percibidos con una sola mirada. Probablemente aguardando a que las personas de la mesa del fondo se parasen de su sitio y marchasen a otro lugar. Esperando, aguardando, espiando. Inmóvil, sobretodo.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 22, 2009 12:04 pm

Tal como había dicho, se había dirigido solamente al baño.

El interior era bastante espacioso para solo tratarse de un baño público, cada vez se sorprendía de los servicios que ofrecía el lugar. Los grifos eran de chapa de bronce y plata y el espejo tenía un margo marmoteado que hacía juego con la superficie de los lavados. El ambiente era bastante higiénico y era perceptible por el mismo aire que despedía el cuarto de hombres. Olor a desinfectante pero con un sutil toque perfumado para no saturar el lugar con el aroma a químico. Para mejor, completamente despejado.

Extrajo de su bolsillo una cajeta de cigarrillo en el cual se veía asomada la cabeza de uno. Lo tomó entre sus dedos enguantados y con un solo chasquido del encendedor que hoy llevaba la llama ardió y la nicotina pasó a invadir su sistema. Exhalo la primera calada con sumo deleite sin molestarse en ver si alguien llegaba, poco importaba después si el lugar terminaba hediendo a cigarro. Una extraña sonrisa se dibujó en las comisuras de sus labios, la cual fue devuelta por su propio reflejo en el espejo de los lavamanos. Ahora mismo su mente estaba buscando contactar con los akuma que estuviesen dentro o en los alrededores de Barcelona. Los que había solicitado también la tarea de investigar el paradero del corazón.

- Idos todos al Restaurante Italiano de la ciudad, ustedes saben como llegar – decía clara y fuerte la voz del Noé en la cabeza de cada criatura que había traído consigo para su misión y que debían encontrarse más o menos en los alrededores en su forma incubierta – matadlos a todos y llamar la atención del exorcista que lleva el corazón consigo.

Apenas y se había dado cuenta de que se encontraba transfigurado en su forma Noé. Los estigmas en la frente y la piel grisácea muerta eran perfectamente reflejados en el inmaculado espejo que seguía devolviéndole esa extraña mueca demencial. Casi a punto de estallar en sonoras carcajadas.

Fuera del baño. Los clientes seguían degustando del agradable ambiente acompañado de una exquisita comida y una agradable compañía para charlar. El tiempo transcurría tanto para los consumidores como los propios trabajadores quienes con aquella actitud diligente hacían los ejercicios más simples por el bien de la comodidad del cliente. El albino seguiría escondido en su paradero e Isabella seguro estaría esperando por algo… algo que a estaba allí.

El primer disparo fue sonoro, claramente audible incluso a distancia como lo serían los gritos de los presentes al ver el agujero mortal que apareció en el estómago de uno de los camareros. En su piel las inconfundibles marcas del veneno de akuma aparecieron hasta ennegrecerle totalmente hasta reducirlo a cenizas. Los gritos de hombres y mujeres angustiados y horrorizados por las máquinas de forma esférica acompañaron el coro sangriento de disparos y estallidos de cristal. No había escapatoria para nadie, las salidas eran precisamente bloqueadas por estos seres que no tardarían en echar todo abajo.

- Matadlos a todos… ¡Matadlos a todos! – vociferaba la voz de mando que correspondía a un nivel dos con forma semejante al de una chicharra humanoide travestida en ropas elegantes de marca inglesa. Los nivel uno incentivados por la voz de su líder prosiguieron a dar el verdadero inicio de la matanza.

A menos a que alguien se pusiese en acción.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 22, 2009 10:29 pm

Se quedo en su asiento, pero aun asi estaba pendiente del lugar, esperaba que el albino hiciera algun movimiento, tambien estaba esperando el retorno del Noah, pasaron unos minutos hasta que sucedio la primera explosion.

-Akumas.....asi que ha decidido presionar al chico- susurro aun tranquila en su asiento- es una lastima que esta comida se desperdiciara- el primer balazo que asoto contra el restaurant dio contra un camarero, desatando asi el panico en el sitio.

Isabella se levanto de su asiento mientras el Nivel 2 daba su orden de matar a todos los presentes, camino unos pasos, sabia que Tyki no se quedaria tan tranquilo viendo como el chico se le escapaba, finalmente miro los alrededores-

-veamos que haces ahora....Allen Walker....-volvio a susurrar-

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Vie Ene 23, 2009 12:18 pm

Allen, tras ver que no sucedía nada, decidió correr contra el tiempo y hacer lo que sabía que tenía que hacer. Corrió literalmente hacia la ventana y se asomó a ella descorriendo las cortinas. La luz le dio de golpe en la cara y le mostró una vida más iluminada que la que había en aquella habitación. Daba a un callejón en la parte trasera del restaurante, donde se veía un muro que no daba salida alguna, varios botes donde depositar la maloliente basura y desperdicios y mugre por todos los rincones. Justo más allá, un joven de no más de 20 años de edad, revisaba unas cajas con una lista, asegurándose de que a estas no les faltara nada.

Parecía que por los momentos, la suerte estaba de parte del albino. Así que, luego de dos segundos dudándolo, abrió la ventana (que para mejores, no estaba cerrada) y salió de allí.

7 minutos después, cuando Allen ya iba por fin a marcharse de aquel sitio, sonó un estruendo dentro del restaurante, y el monóculo en su ojo izquierdo empezó a rodar, inundando su pupila de un color absoluto negro con un espiral rojo que sería la manifestación de su maldición.

-No puede ser -musitó entre sorprendido y preocupado, y ante el primer grito de horror, recorrió la poca distancia que lo separaba del establecimiento en prácticamente cuatro grandes zancadas.

Dentro, las personas gritaban y se escondían atemorizadas en lugares que parecían a prueba de tiroteos. Los akuma disparaban sin son ni ton, llegándole a dar a uno que otro humano que desafortunadamente se cruzaba en su camino.

Uno de ellos se percató de la presencia de un hombre con su pareja, ocultos detrás de una mesa que se había volcado con el alboroto, y los apuntó directamente. Ambos cerraron los ojos temblando de pies a cabeza, esperando la muerte instantánea. El Akuma disparó tres balazos que nunca llegaron a los cuerpos de aquellas inocentes personas.

Una extensa capa blanca recubría desde el frente a aquellas persona, desafiando a la bestia metalizada. Sin avisar, un extremo de aquel manto se estiró como un arpón y atravesó por completo a su adversario, erradicándolo en una sonora explosión que llamó la atención de los demás.

-Tranquilos, están a salvo -musitó la voz serena de Allen por detrás de aquellas personas. Sonreía, con su típico gesto de querer transmitirles a los demás el que todo estaría bien, y se encaró a todos los Akuma con un semblante serio e imperceptiblemente melancólico- Trae la salvación a esas penosas almas de los Akuma -recitó como un conjuro.

Rápidamente la capa volvió a extenderse, para así empalar a todos los de nivel uno que estaban a su frente y un poco más allá. Las explosiones fueron casi en reacción cadena, y la gente se cubría sus cabezas de los azotes por el impacto, preguntándose si aquel muchacho que los estaba protegiendo, era el mismo que habían visto entrar hace media hora atrás.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Lun Ene 26, 2009 12:12 pm

El chico ya había entrado en acción tal cual como lo había planeado, valerse de su sentido de la justicia y el valor había sido cosa de niños, como atraer abejas a la miel. Era imposible ignorar el llamado de los inocentes y era precisamente eso lo que le daría la ventaja. Mientras algunas personas seguían paralizadas por el miedo escondidas en algún rincón del establecimiento, asomando de vez en vez la mirada debatidos entre la curiosidad y el terror, unos pasos bastante calmados se escuchaban aproximarse al escenario, los cuales pisaban los cristales regados de los utensilios de vidrio causando un chasquido bastante audible bajo sus suelas. Llevó la mano a la base de su cigarrillo y lo retiró mientras dejaba salir con mucha elegancia una bocanada de humo mientras esbozaba una despreocupada sonrisa. Bastante satisfecha de lo que veía. El elegante restaurante ahora estaba a punto de caer y hacerse escombros como un escenario de guerra. Al igual que los humanos que permanecían adentro. No se cansaba de pensarlo: “Que frágiles eran los humanos”.

- Espera un momento, chaval… - irrumpió la voz del Noé del placer quien ahora se encontraba en medio de pleno escenario como si fuese un presentador de alguna obra – creo que estas pasando por alto la situación… - y dicho esto dio un medio giro hacía su derecha y señaló con la mano correspondiente un punto del salón.

En ese rincón fácilmente ignorado se encontraba un grupo de trabajadores aterrorizados que sostenían algunos de sus compañeros heridos y semiconscientes. La amenaza residía que a sus costados había tres akumas de nivel tres apuntándolos con sus armas. A esa distancia no cabía duda de que el impacto llegaría y el chico no tendría tiempo de salvarlos. Tyki sonrió ante la expresión de sus rostros, de verdad que le gustaba ver el miedo reflejado en los ojos de sus víctimas. Con un gesto de sus ojos le indicó a la hechicera que tomase partido en el asunto. Era mejor si eran dos contra uno.

- Entonces que dices… - y nuevamente se giró hacía el peliblanco llevándose nuevamente el cigarro a los labios - ¿tenemos un trato?

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Lun Ene 26, 2009 12:56 pm

El escenario se veia bastante mal para el exorcista, el Noé la miro y acto inmediato Isabella camino unos pasos acercandose a este, inspecciono al peliblanco, viendo su inocencia por ultimo, alzo su mano derecha y susurro.

-Zeus...aparece ya...- una esfera de cristal aparecio en su mano, en esta se distinguia una fuerza de color Calipso que fluia en el interior-

Sin quitarle la mirada de encima y lista para comenzar a pelear, espero la respuesta del joven Walker ante las palabras y acciones de Tyki-

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Mar Ene 27, 2009 8:53 pm

Primero el rostro de Allen al mirar al Noé se llenó de verdadera sorpresa y luego transmutó a uno de rabia y desprecio. Tenía los labios separados en una mueca que daba a mostrar sus blancos dientes fuertemente apretados. Apretaba su puño derecho con fuerza mientras que su garra izquierda permanecía tensa y forzadamente quieta.

Su mirada volvió a donde se hallaban aquellos trabajadores ahora amenazados por los akuma. Ciertamente, la distancia que los separaba era mínima. Si sacaba alguna probabilidad de salvarlos, sabía que estaría bastante lejos de la realidad, por lo que acabó meditando las palabras del moreno todavía sin decir palabra alguna. Las personas que estaban detrás del muchacho, protegidas por su blanca Inocencia, miraban con perplejidad y miedo la escena, sin comprender nada en absoluto.

La escena se quedó paralizada casi por cinco minutos enteros. El muchacho dirigía su vista hacia puntos muertos y de a ratos los centraba en su enemigo Noé y la compañera que estaba con él, ¿Quién era y por qué estaba junto a Tyki? Al final, cuando la ausencia de ruido fue tal que incluso el transcurso de las manijas del reloj de la sala se escucharon casi como un grito, el muchacho abrió la boca esta no exactamente para mostrar los dientes.

-¿De qué clase de trato estamos hablando, señor Tyki Mikk?

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 29, 2009 1:03 pm

Probó un poco de aquel delicioso cigarro que curiosamente le sabía a gloria en aquel momento, su aliento acompañado de una tenue nubecilla de humo escaparon de sus labios como en un suspiro, dejando estos algo separados entre sí como si fuese a decir algo mientras el extremo del cigarro le colgaba de un lado de la boca. El observar la tensión en el escenario y la impotencia del joven exorcista le producía una satisfacción bastante razonable a su parecer, el tener a su archienemigo prácticamente paralizado en contra de su voluntad era un mérito que no se quitaba, más no por eso descuidaba su posición. Sus ojos rodaron hacía Isabella y su arma, no había tenido en mente el usar la fuerza de la guardia del Conde en contra de los exorcistas pero aquello tampoco era malo. Los hechiceros eran más peligrosos de lo que cualquiera pudiese imaginar.

Hasta que al volver la mirada al albino, este después de interminables minutos de silencio y meditación se rompieron cuando este habló casi arrastrando las palabras, reacción propia de la impotencia. Por fin decía lo que tanto ansiaba escuchar: ¿De qué clase de trato estamos hablando, señor Tyki Mikk?

Sus comisuras se ensancharon curvando así sus labios en una sonrisa bastante irónica y a la vez satisfactoria. Las doradas orbes del Noé pasearon de la expresión que guardaba el rostro del chico hacía sus brazos donde se suponía que… ¿Dónde estaba el baúl? ¿En que lugar ocultaba la preciada inocencia corazón? Seguramente la habría escondido prudentemente o no era el quien la llevaba ¿Sería Cross? Imposible. Tenía que sacar las respuestas ahora mismo, y como siempre sin mostrar ni un solo ápice de preocupación. Y su mirada retomó a los ojos del chico enmarcando una ceja con aire escéptico.

- Deberías suponer la razón por la que estamos aquí… ¿En dónde esta el corazón, chaval? – dijo nuevamente revisándole de pies a cabeza con la mirada y nuevamente volviendo a su rostro – veo que no lo llevas contigo… que mal…

Interpretando bien aquellas palabras y segundas intenciones del Noé, uno de los akuma nivel tres apartó a uno de los camareros del grupo de rehenes, al cual sujetaba brutalmente y ponía contra el piso mientras sujetaba con fuerza insoportable sus muñecas, y su pie daba con un lado de su rostro. Sus compañeros miraban horrorizados y temerosos por la vida de su colega y las de ellos mismo, aunque no comprendiesen el asunto intuían que tenían las de perder… El camarero rompió el silencio con un alarido seguido de un “crack” producido en sus huesos ahora rotos. El nivel tres se carcajeó y sus compañeros le secundaron por lo bajo.

- Porque no seremos nada tolerantes con las demoras en caso de que la hallas escondido… - agregó con tranquilidad el Noé del Placer calando de su cigarro para continuar – todavía hay muchos huesos por romper en esta sala – y una despreocupada sonrisa surcó su rostro con aire malicioso y siniestro.

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 29, 2009 8:36 pm

En ese momento, algo rodó hasta lo que antes era la puerta del restaurante, era... Un yoyo?

- QUE NADIE SE MUEVA! Ò_Ó - Gritó Chaos al estilo policía, recogiendo el yoyo del suelo y apuntando a los akuma con su arma anti-akuma (aunque no era una pistola ni se le parecía) luego soltó el peluche - Inocencia, actívate! - Dijo, para luego ponerse en posición de ataque al igual que el peluche. Desde luego que era una exorcista rara, dejaba ver su lado infantil incluso en las misiones...

Tema: Re: En Barcelona - Cross Road's Jue Ene 29, 2009 9:07 pm

Tyki, que solo se había molestado en mirar al albino desde aquel ángulo, es decir, su frente completa, no parecía haberse dado cuenta del bulto que le sobresalí por la espalda, metido entre el pantalón sobre aquella zona. Eso era en parte algo bueno, y algo malo.

Allen comprobó que ya estaban realmente al tanto de todo, cuando la pregunta acerca del corazón le bombardeó. Tyki parecía estar muy convencido de que era él el que poseía en esos instantes tal reliquia, lo cual no estaba para nada lejos de la realidad. El sonido de los huesos quebrándose de aquella inocente persona retumbó en Allen como un aviso de emergencia.

-¡No te atrevas a hacerlo! –le espetó iracundo al Noé, con toda la rabia fija en el brillo de sus platinados ojos y entonces…

Una niña que entró estrepitosamente al local, gritó a los cuatro vientos una frase bastante rayada en los casos policíacos. Todas las miradas se centraron en ella, incluyendo a Allen, que la identificó rápidamente como miembro de la orden tras verificar el abrigo que cargaba encima (increíble ¿tan pequeña era?) y de alguna manera supo, que aquella actuación barata e infantil, le había sacado de aquel problema.

Todavía sin cambiar de posición, su capa blanca se estiró sigilosamente hasta donde estaban los Akuma que tenían de rehenes a los camareros y que también se encontraban distraídos por la aparición de Chaos, y con todo el placer del mundo, los acribillaron y perforaron, sacándolos de aquel juego en definitiva. Los camareros corrieron a esconderse, enseguida que las explosiones resonaron.

Entonces apuntó con la garra al Noé, todavía con aquella ferocidad latente expresa en sus ojos. Algo empezaba a cocerse en su mente, ¿Habrían ido hacia allá otros exorcistas más?

[Off: posteo antes que Azura porque de alguna manera me tengo que largar xDU... ]

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