El chino les recibió con una cálida sonrisa a ambos, increíble el encontrarlo a él tan dispuesto en su trabajo y no durmiendo en el quinto espacio de la galaxia. Pues la respuestas a esa interrogante estaba en el chichón que escondía bajo el gorro blanco de su cabeza, el dolor de la atizada de Reever apenas le daba para pensar con claridad.
- Akeru chan, James kun ^^ encantado de verlos nuevamente por aquí. Bueno, creo que aun no se conocen ¿o si? – decía anímicamente para luego regresar a su faceta seria como supervisor de la Orden Oscura.
- Bueno, bueno, los llamé para lo siguiente…
>> Por los informes que hemos recibido de la General Klaud Nine, una agrupación de akumas se mueve por el norte de Asia, hace no mucho estuvo en China y ahora se encuentra al norte de Rusia, donde según sus propias palabras “estos se han vuelto más numerosos y cada vez más constantes”. Asevera que conforme más se acerca al norte del continente, mayores son los akumas que aparecen en su travesía. Su misión es encontrarse con ella en un pueblo que queda al norte de Rusia y asistirla en su investigación, deben averiguar que esta causando el que tantos akumas estén en el territorio asiático y barrer con todos antes de que causen demasiados problemas y traigan mayores desgracias, cosa que el Conde del Milenio NO pasará por alto.
- Pueden ir al departamento científico, allí les espera la puerta Nº 39 y el buscador Seryen que los acompañará en su misión, le reconocerán de inmediato. Esta también es una buena oportunidad de que ambos se entrenen como exorcistas y se acostumbren… - aquello último se escapó como un susurro melancólico, pero rápidamente lo compensó con una sonrisa cachetona e infantil de caricatura.
- Y me traen un regalito de Rusia ¿vale? ¡No se les olvide! x3